Buscan al causante de un grave accidente

Era la madrugada del 21 de septiembre, cuando Pablo Sarapura cumplia con su labor como chofer de taxi, al rededor de  las 5:30 se desplazaba por calle Los Geranios de Villa Las Rosas. Cuando doblo orillando la unidad penitenciaria, sintió un fuerte choque del lado de atrás del vehículo.

El fuerte impacto provocó que el taxi que manejaba Pablo golpeara otro vehículo que circulaba por delante. Desconcertado y sorprendido por el suceso no logro ver el auto que lo chocó por detrás por que este se dió a la fuga.

El taxista en ese momento no presentaba signos de alerta que requirieran de atención médica, por lo que su día transcurrió de manera habitual. Lo único que sentía era dolor de cabeza, lo que con el correr de las horas se intensificó, provocando que Sarapura se dirigiera al Hospital San Bernardo.

Una vez atendido en la guardia del Hospital solo le recetaron calmantes, argumentando que el dolor era producto del choque sufrido por Pablo en horas de la madrugada y el cuadro no era de gravedad. También le asignaron un turno para realizarse una tomografía el jueves siguiente, osea, tres días después del suceso.

Lamentablemente el joven chofer no llegó al turno y es que el miércoles, un día antes, mientras conducía sufrió una convulsión. Esto provocó que perdiera el control del volante y terminara impactando con un contenedor. Pablo en esa oportunidad estaba realizando un viaje, por lo que la pasajera llamó de inmediato al 911 solicitando una ambulancia.

Una vez que arribó el SAMEC, Pablo ya había recobrado el sentido, por lo que fue atendido en el lugar y los paramedicos se retiraron. Unos minutos después nuevamente se repitió la convulsión y los uniformados que trabajaban sobre el siniestro solicitaron el regreso de la ambulancia.

En ese momento comenzó la pesadilla para Pablo y su familia, él ingresó en código rojo al Hospital San Bernardo, de inmediato se contacto a familiares para que autoricen una cirugía craneal. Los doctores se percataron de que tenía hematomas en la cabeza y el cuadro era realmente grave.

La cirugía duró aproximadamente cinco horas y lamentablemente tuvieron que extraerle parte del hueso del cráneo, desde ese entonces Sarapura quedó en coma inducido. Dos días después y estudios de por medio se detectaron más hematomas que requerían intervención quirúrgica urgente y la extracción de otra parte del hueso fue inevitable.

Pablo Sarapura quedó internado al rededor de un mes y medio, hasta que el 2 de octubre lo trasladan a su casa con internacion domiciliaria. Desgraciadamente una semana después, el día 9, sufrió otro episodio de convulsiones y nuevamente fue trasladado urgente al nosocomio. Una vez ahí, los profesionales lo diagnosticaron con epilepsia de por vida, como consecuencia del daño neurológico sufrido a raíz del accidente del día 21 de septiembre pasado.

Pablo tiene tan solo 32 años, tiene esposa y dos hijas de 6 y 7 años. El era el único sostén de su hogar y salía todos los días a recorrer las calles de la ciudad a bordo de un taxi, para de esa manera sacar adelante a su familia y poder construirles la casa a sus hijas.

Aquella madrugada fatídica y gracias a un irresponsable al volante, comenzó un infierno para la Familia Sarapura. Lamentablemente Pablo quedó en estado vegetativo y con un cuadro de epilepsia irreversible.

Su familia se comunicó con nuestro medio para dar a conocer la terrible situación que atraviesan y pedir por favor si alguien vio el accidente o si en algún taller de chapa y pintura ingresaron un auto chocado de la parte de adelante, color negro con sonido en el baúl, datos que aportó un testigo.

Si el suceso en sí ya es lamentable, mientras Ana Belén Chocobar, esposa de Pablo, cuidaba de él en el hospital, malvivientes ingresaron a su vivienda y la desvalijaron por completo. La situación de la familia es desesperante, necesitan de la ayuda y solidaridad de los salteños.